Wilt atraviesa una difícil situación financiera y se ve obligado a hacer horas extra a la vez que su esposa le suministra furtivamente un horrible afrodisíaco tratando de reavivar su deseo erótico. Y, para más inri, en los lavabos del Politécnico donde trabaja como profesor aparece muerta por sobredosis la hija de un distinguido lord británico…